El RC Celta quiere reiterar, desde la más absoluta tranquilidad y tras una pausada reflexión, su absoluto desconcierto y malestar por el arbitraje sufrido este sábado ante el Getafe, que ofreció decisiones totalmente incomprensibles.
El club se pregunta si una actuación arbitral como la del pasado sábado puede quedarse en el olvido sin un mínimo de reflexión y análisis por parte de los implicados y si su gravedad no es mayor, si cabe, dada la mala o nula utilización de elementos de apoyo y corrección como el VAR.
El club se pregunta qué criterio se puede aplicar para señalar penalti de Hugo Mallo y por qué el colegiado no fue advertido desde el VAR de su manifiesto error.
El RC Celta se pregunta si en una jugada tan ajustada como la del fuera de juego señalado a Hugo Mallo en el segundo gol celeste es suficiente una revisión de tres minutos a través del VAR cuando anteriormente ante la duda no se señalaba fuera de juego. ¿Por qué no se mostraron las líneas y en un partido posterior sí se hizo?.
Se pregunta además por qué el colegiado no señaló ninguna de las infracciones, algunas más que evidentes, que sufrió Maxi Gómez y después el delantero sufrió las dos amarillas más rápidas de la historia de esta competición.
El club se pregunta por qué ni el árbitro ni el VAR fueron capaces de ver la clara mano dentro del área de Flamini en la segunda mitad. ¿Cómo es posible que esa jugada, clara y determinante, les pasara desapercibida?.
La revisión de las jugadas decisivas del partido no hace si no ratificar la postura del RC Celta, que fue perjudicado de manera incomprensible, en especial cuando el arbitraje dispone de elementos técnicos como el VAR para subsanar errores claros y manifiestos como los sufridos por el equipo celeste.