El estadio Abanca Balaídos vivió esta semana una jornada cargada de emoción con la visita de un grupo de personas mayores, internos de la residencia Ballesol, afectadas por el Alzheimer.
Una visita que comenzó con un recorrido por el corazón del estadio, los vestuarios, donde todos los asistentes recibieron el cálido saludo de la presidenta del RC Celta, Marián Mouriño. Un momento muy especial en el que sus miradas llenas de nostalgia se entrelazaron con un entorno lleno de historia. Acto seguido, el grupo tuvo la oportunidad de pisar el césped de Abanca Balaídos donde entonaron el antiguo himno del Celta, reviviendo un momento único. Finalmente, en el palco presidencial, el director del Área Celtista, David González, entregó una camiseta conmemorativa a Severino, socio número 4 del club, en agradecimiento a todos sus años de entrega, de afouteza y de celtismo.
Una iniciativa enmarcada en una serie de talleres y actividades organizadas por la Asociación de Antiguos Jugadores del RC Celta, quienes trabajan activamente para conectar a las personas mayores con los valores y recuerdos que el fútbol puede despertar en ellos, utilizando el deporte como una vía para evocar momentos tan significativos.
De esta manera, el RC Celta reafirma su compromiso con todas las personas que han dedicado una vida al celtismo, cuidándoles y demostrando que esto es más que fútbol. Somos una familia.