El guardameta gallego Sergio Álvarez abandonó la enfermería este miércoles tras casi un mes de baja por una rotura fibrilar en el muslo derecho. El ‘Gato de Catoira’ completó el entrenamiento con el grupo con normalidad y, tras la sesión matinal, recibió el alta médica. Con la recuperación de Sergio, el entrenador Fran Escribá por fin tiene a su disposición a los tres porteros de la primera plantilla.